Los dos últimos días no han sido muy buenos tampoco. El proceso de diarrea continuó un día más de lo que tenía previsto y me ha impedido comer prácticamente nada. Creo que hoy empezará a mejorar la situación a pesar de la mala noche que he pasado.
He marcado un nuevo mínimo de peso (63,9 Kg) y me siento bastante débil y cansado.
En cuanto a la espalda, ha remitido el dolor insoportable que tenía cuando estaba de pié. Por ejemplo, ahora puedo ducharme y afeitarme del tirón. Esto era impensable hace una semana.